Génesis 19:6

Cuando estamos en medio de la tentación, lo que realmente queremos es, en cierto modo, "tener nuestro pastel y comérnoslo también" - queremos ser mejores, queremos hacer lo correcto, queremos estar más cerca del Señor... pero nos gustaría hacerlo sin renunciar realmente a nuestros malos deseos. Así que hay una tendencia a querer hacer la paz entre los dos, hacer que el mal no sea tan malo.

Eso es lo que se ilustra aquí y en el siguiente versículo. Lot -que representa a los que están en un estado de cuidado de los demás- sale a la puerta exterior de su casa para dirigirse a los hombres de Sodoma. Las puertas representan conceptos y deseos introductorios que conducen al estado de amor representado por el interior de la casa, por lo que al ir a la puerta exterior está buscando algo bueno en los hombres para hacer un llamamiento. Pero también conoce el peligro, así que cierra la puerta interior, protegiendo el estado de amor que hay dentro.

Esto se parece a que nos digamos a nosotros mismos que nuestros deseos "no son realmente tan malos", mientras sabemos, en el fondo, que sí lo son.