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Ahora pues, señor mío, vive el señor y vive tu alma, que el señor te ha vedado que vinieses a derramarsangre, y vengarte por tu propia mano. Sean, pues, como Nabal tus enemigos, y todos los que procuran mal contra mi señor.
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Y moró David con Aquis en Gat, él y los suyos, cada uno con su familia; David con sus dosmujeres, Ahinoam jezreelita, y Abigail, la que fuemujer de Nabal el del Carmelo.