Bible

 

Joel 2:29

Studie

       

29 Y aun también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días.

Komentář

 

Explorando el significado de Joel 2

Napsal(a) Rev. George McCurdy (strojově přeloženo do Español)

En el capítulo 2 de Joel, la historia interna es esta:

Debido a que la gente sensual había destruido a la "iglesia entera" con falsedades y maldades, era hora de que el Señor viniera a ejecutar su juicio. La variedad de locuras de la gente sensual causó que el bien y la verdad, y los conocimientos, se dispersaran.

El Señor iba a hacer la guerra contra el pueblo sensual. Él tocó la trompeta para dar la alarma. Su aproximación haría temblar a los que se oponían a Él. Sobre los orgullosos y resistentes iba a caer un juicio terrible. Los malvados sintieron la aproximación del Señor, y no quisieron perder su poder.

Así que los malvados tomaron la apariencia de "caballos de corcel". Se engancharon a los carros. Encendieron fuegos en los rastrojos del campo. Se hizo un llamamiento para formar un poderoso ejército. Se alinearon en formación y no rompieron filas. Se lanzaron con sus armas, corriendo por toda la ciudad. Treparon por las murallas de la ciudad, rompiendo las ventanas de las casas como ladrones.

La batalla no estuvo exenta de algunos aspectos negativos temporales. La acción del sensual provocó el oscurecimiento del sol y la luna, e hizo que las estrellas del cielo cayeran del cielo.

Otra llamada fue hecha por el Señor a su pueblo. Les pidió que volvieran a Él con "todo vuestro corazón, con ayuno, con llanto y con luto... Rasgad vuestros corazones y no vuestros vestidos". La exhortación aquí es a convertirse y arrepentirse, y a ser sabios.

Se nos enseña que el Señor volverá a establecer la iglesia; le dará bienes y verdades, y eliminará el mal y, por tanto, el infierno. La nueva iglesia tendrá confianza en el Señor y lo reconocerá de corazón. La Divinidad del Señor llenará a los de la nueva iglesia con todas las cosas, y Él los vivificará. Las falsedades del mal y los males de la falsedad se disiparán en el "día de su juicio". Los que reconozcan al Señor serán salvados.

El tema de este capítulo es un llamado a "despertar", a escuchar la Palabra del Señor y a responder a su grito de guerra. Porque no hay duda en cuanto al resultado de esta batalla: El Señor, al final, ganará la batalla por Su Palabra y Su Iglesia.