28
Y oyó el SEÑOR la voz de vuestras palabras, cuando me hablabais; y me dijo el SEÑOR: He oído la voz de las palabras de este pueblo, que ellos te han hablado; han presentado bien todo lo que han dicho.
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原作者： Alexander Payne (机器翻译成： Español)
Verso 28. Y el Señor atiende a este deseo del alma cuando medita sobre los mandatos divinos, e instruye al alma por medio de la Palabra que sus deseos son escuchados; y que estos pensamientos son buenos como procedentes de la humillación del corazón.
