来自斯威登堡的著作

 

Sabiduría Angélica Sobre El Divino Amor y La Divina Sabiduría#336

学习本章节

  
/432  
  

336. Los malos usos no fueron creados por el Señor, sino que se originan junto con el infierno.

Todos los bienes que existen en los actos, se llaman uso; y todas las cosas malas que existen en los actos, también se llaman usos; pero estas últimas se llaman malos usos, los primeros buenos usos. Ahora, como toda cosa buena viene del Señor, y como toda cosa mala viene del infierno, se sigue que todos los buenos usos fueron creados por el Señor, y que los malos usos se originan en el infierno. Por los usos, de que se trata especialmente en este artículo, se entienden todas las cosas visibles sobre la tierra, como toda especie de animales y vegetales. Todas estas, que son de uso al hombre, proceden del Señor; y las que dañan al hombre, vienen del infierno. Por usos procedentes del Señor se entienden también todas aquellas cosas que perfeccionan el racional del hombre y que lo hacen capaz de al Señor; y por malos usos se entienden todas aquellas cosas que destruyen su racional y lo hacen incapaz de llegar a ser espiritual. Las cosas dañosas al hombre se llaman usos, porque sirven al mal y para hacer mal y ayudan también para absorber los maleficios, y aun sirven de remedios. Se dice uso en uno y otro sentido, del mismo modo que hablamos del amor que es bueno o del amor que es malo, y el amor llama uso a toda cosa que sale de sí misma.

  
/432  
  

Traducido por el Dr. Calleja al español de la traducción al inglés por el Rev. John Whitehead. Transcrito y revisado por David Simpson, y también revisado por Daniel Calvo, y por los reverendos Andrew Heilman y Johnny Villanueva.

来自斯威登堡的著作

 

Sabiduría Angélica Sobre El Divino Amor y La Divina Sabiduría#302

学习本章节

  
/432  
  

302. Las atmósferas, que son tres en número en ambos mundos, espiritual y natural, en sus últimos terminan en las sustancias y materias, tales como están en las tierras.

En la Parte III, ns. 173176 se demostró que en cada mundo, el espiritual y el natural, hay tres atmósferas, cada una de las cuales es distinta una de otra por grados de altitud, y que en su progresión descendente, decrecen por grados de latitud. Ahora, como las atmósferas decrecen así en su descenso, se sigue que ellas llegan a hacerse continuamente más compactas e inertes, y finalmente al último se hacen tan compactas e inertes, que ya no son propiamente atmósferas, sino sustancias en reposo, y en el mundo natural fijas como el material de la tierra, llamándose entonces materia. Siendo éste el origen de estas sustancias y materia, se sigue que, primero, ellas también son de tres grados; segundo, que ellas se sostienen en mutua conexión por las atmósferas circundantes; y tercero, que ellas se adaptan a la producción de todos los usos en sus formas.

  
/432  
  

Traducido por el Dr. Calleja al español de la traducción al inglés por el Rev. John Whitehead. Transcrito y revisado por David Simpson, y también revisado por Daniel Calvo, y por los reverendos Andrew Heilman y Johnny Villanueva.