28. La Divina Esencia Misma es Amor y Sabiduría.
Si fuesen reunidos todos los conocimientos, y fuesen sujetados a la inspección del pensamiento y con una cierta elevación de espíritu se buscase el universal de todas las causas; no se podrá evitar la conclusión de que ellos son el Amor y la Sabiduría; porque estos dos son la esencia de todas las cosas en la vida del hombre. Todas las cosas de la vida civil, moral y espiritual dependen de estos dos, y sin estos dos no hay nada. Del mismo todas las cosas del hombre en conjunto, esto es, como se dijo antes, de una sociedad pequeña o grande, de un reino, de un imperio, de la Iglesia o del cielo angélico. Prívesele del Amor y la Sabiduría y se verá si queda algo de ella; encontraréis que, sin estos como principios de que dependen, no son nada.
