De obras de Swedenborg

 

El Cielo y el Infierno #1

Estudiar este pasaje

  
/ 603  
  

1. Prólogo del Autor

Cuando el Señor, ante Sus discípulos, habla de la consumación del siglo, por lo cual se entiende el último período de la vida de la iglesia, al final de la predicción acerca de los sucesivos estados de la misma con respecto al amor y a la fe, dice así:

Luego... después de la aflicción de aquellos días el sol se oscurecerá y la luna no dará su lumbre, y las estrellas caerán del cielo y las potencias del cielo serán conmovidas, y entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre venir en las nubes del cielo con potencia y grande gloria, y enviará sus ángeles con trompeta y magna voz, y juntará sus escogidos de los cuatro vientos, del extremo de los cielos hasta el extremo de ellos (Mateo 24:29-31).

Él que toma estas palabras en el sentido literal cree que todo cuanto expresan según la descripción en ese sentido se verificará en el postrer tiempo llamado el último juicio, es decir, no solamente que el sol y la luna se oscurecerán y que las estrellas caerán del cielo, así como que la señal del Señor aparecerá en el cielos y que verán a Él en las nubes y también a los ángeles con trompetas, sino que también según la predicción en otro lugar, el mundo visible entero perecerá y que luego aparecerá un nuevo cielo con una nueva tierra. En esta creencia está hoy día la mayor parte en la iglesia. Pero los que así creen no conocen los arcanos que están ocultos en cada detalle del Verbo; porque en cada detalle del Verbo hay un sentido interior, el cual no expresa cosas naturales y mundanas como las que se hallan en el sentido literal, sino espirituales y celestiales, y esto no tan sólo con respecto a la significación de una pluralidad de palabras, sino también con respecto a cada palabra en particular, porque el Verbo es compuesto de puras correspondencias, a fin de que haya sentido interior en cada detalle. La índole de este sentido se puede conocer por todo cuanto con respecto al mismo se ha dicho y manifestado en "Arcana Coelestia, " lo cual también puede verse en compendio en la explicación de "El Caballo Blanco, " del cual se habla en el Apocalipsis. Según este sentido deben entenderse las cosas que en el lugar arriba indicado dijo el Señor acerca de Su venida en las nubes del cielo. Allí, el "sol" que se oscurecerá significa el Señor con respecto al amor, la "luna" el Señor con respecto a la fe, las "estrellas" los conocimientos del bien y de la verdad o sea del amor y de la fe la "señal del Hijo del Hombre en el cielo" la aparición de la Divina verdad; las "tribus de la tierra, " que lamentarán, todo cuanto pertenece a la verdad y al bien o sea a la fe y al amor; " la venida del Señor en las nubes del cielo con potencia y gloria, " Su presencia en el Verbo y la revelación; por "nubes" se significa el sentido literal del Verbo, y por "gloria" el sentido interior del Verbo; por "ángeles con trompeta y potente voz" se significa el cielo de donde procede la Divina verdad. Por esto es evidente que por aquellas palabras del Señor se entiende que al final de la iglesia, cuando ya no quede amor alguno y por ello tampoco fe alguna, abrirá el Señor Su Verbo con respecto a su sentido interior, y revelará los arcanos del cielo. Los arcanos que en lo siguiente serán revelados se refieren al cielo y al infierno así como a la vida del hombre después de la muerte. El hombre de la iglesia hoy día apenas sabe cosa alguna acerca del cielo y del infierno, ni de su vida después de la muerte, por más que todas estas cosas se hallan consignadas en el Verbo; hasta hay muchos, nacidos dentro de la iglesia, que las niegan, diciendo en su corazón: "¿Quién ha venido de allí y las ha contado?" Con el fin, pues, de que semejante negación, la cual reina principalmente entre aquellos que tienen mucho de la sabiduría del mundo, no contamine y corrompa también a los de sencillo corazón y de sencilla fe, me ha sido otorgado estar con los ángeles, y hablar con ellos como hombre con hombre y así como ver las cosas que hay en el cielo y también las que hay en el infierno, y esto por espacio de trece años, siéndome ahora permitido referirlas por oídas y vistas, esperando que así la ignorancia será iluminada y la incredulidad disipada. La razón por la cual tal inmediata revelación tiene lugar actualmente es que esta revelación es lo que se entiende por "la venida del Señor."

  
/ 603  
  

Swedenborg en Español website and Swedenborg Library, Bryn Athyn College of the New Church, Bryn Athyn, Pennsylvania.

La Biblia

 

Juan 10

Estudio

   

1 De cierto, de cierto os digo: El que no entra por la puerta en el corral de las ovejas, mas sube por otra parte, el tal es ladrón y robador.

2 Mas el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es.

3 A éste abre el portero, y las ovejas oyen su voz; y a sus ovejas llama por nombre, y las saca.

4 Y cuando ha sacado fuera sus ovejas, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz.

5 Mas al extraño no seguirán, antes huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños.

6 Esta parábola les dijo Jesús; mas ellos no entendieron qué era lo que les decía.

7 Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: YO SOY la puerta de las ovejas.

8 Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y robadores; mas no los oyeron las ovejas.

9 YO SOY la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.

10 El ladrón no viene sino para hurtar, y matar, y destruir las ovejas ; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.

11 YO SOY el buen pastor; el buen pastor su alma da por sus ovejas.

12 Mas el asalariado, y que no es pastor, de quien no son propias las ovejas, ve al lobo que viene, y deja las ovejas, y huye, y el lobo las arrebata, y esparce las ovejas.

13 Así que, el asalariado, huye, porque es asalariado, y las ovejas no le pertenecen.

14 YO SOY el buen Pastor; y conozco mis ovejas , y las mías me conocen.

15 Como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi alma por las ovejas.

16 También tengo otras ovejas que no son de este corral, aquellas también me conviene traer, y oirán mi voz; y se hará un corral, y habrá un pastor.

17 Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi alma, para volverla a tomar.

18 Nadie me la quita, mas yo la pongo de mí mismo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.

19 Y volvió a haber disensión entre los judíos por estas palabras.

20 Y muchos de ellos decían: Demonio tiene, y está fuera de sí; ¿para qué le oís?

21 Decían otros: Estas palabras no son de endemoniado; ¿puede un demonio abrir los ojos de los ciegos?

22 Y se hacían las Encenias (dedicación) en Jerusalén; y era invierno;

23 Y Jesús andaba en el templo por el portal de Salomón.

24 Y le rodearon los judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo quitas nuestra alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente.

25 Les respondió Jesús: Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, éstas dan testimonio de mí;

26 mas vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho.

27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen;

28 y yo les doy vida eterna y no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano.

29 Mi Padre que me las dio, mayor que todos es y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.

30 Yo y el Padre una cosa somos.

31 Entonces volvieron a tomar piedras los judíos para apedrearle.

32 Les respondió Jesús: Muchas buenas obras os he mostrado de mi Padre, ¿por cuál obra de esas me apedreáis?

33 Le respondieron los judíos, diciendo: Por la buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; y porque tú, siendo hombre, te haces Dios.

34 Les respondió Jesús: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois?

35 Si dijo, dioses, a aquellos a los cuales fue hecha palabra de Dios (y la Escritura no puede ser quebrantada),

36 ¿a quien el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decís: Tú blasfemas, porque dije: Hijo de Dios soy?

37 Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis.

38 Mas si las hago, y aunque a mí no me creáis, creed a las obras; para que conozcáis y creáis que el Padre es en mí, y yo en él.

39 Por eso procuraban otra vez prenderle; mas él se salió de sus manos;

40 Y se volvió al otro lado del Jordán, a aquel lugar donde primero había estado bautizando Juan; y permaneció allí.

41 Y muchos venían a él, y decían que Juan, a la verdad, ninguna señal hizo; mas todo lo que Juan dijo de éste, era verdad.

42 Y muchos creyeron allí en él.

   

La Biblia

 

Juan 16:13-15

Estudio

      

13 Pero cuando viniere aquel Espíritu de verdad, él os guiará á toda verdad; porque no hablará de sí mismo, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que han de venir.

14 El me glorificará: porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.

15 Todo lo que tiene el Padre, mío es: por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.