El Cielo y sus maravillas y el Infierno de cosas oídas y vistas

ÍNDICE GENERAL DEL CONTENIDO

Parte I — El Cielo

§1 [Prólogo del Autor]

Capítulo 1, (2-6), El Dios del Cielo es el Señor

Capítulo 2, (7-12), La Divinidad del Señor hace el Cielo

Capítulo 3, (13-19), En el Cielo la Divinidad del Señor es el amor a Él y la caridad hacia el prójimo

Capítulo 4, (20-28), El Cielo está dividido en dos reinos

Capítulo 5, (29-40), Hay tres cielos

Capítulo 6, (41-50), Los cielos se componen de innumerables sociedades

Capítulo 7, (51-58), Cada sociedad es un Cielo en la más pequeña forma, y cada ángel en la más pequeña forma, constituye un Cielo

Capítulo 8, (59-67), Todo Cielo en su conjunto, refleja a un sólo hombre

Capítulo 9, (68-72), Cada sociedad en el Cielo refleja a un sólo hombre

Capítulo 10, (73-77), Todo Ángel está en el Cielo en forma completamente humana

Capítulo 11, (78-86), De la Divina Humanidad del Señor es de donde el Cielo, como un todo y una parte, se refleja en el hombre

Capítulo 12, (87-102), Hay una correspondencia de todas las cosas del Cielo con todas las cosas del hombre

Capítulo 13, (103-115), Hay una correspondencia del Cielo con todas las cosas de la Tierra

Capítulo 14, (116-125), El sol en el Cielo

Capítulo 15, (126-140), La luz y el calor en el Cielo

Capítulo 16, (141-153), Las cuatro partes del Cielo o los cuatro puntos cardinales

Capítulo 17, (154-161), Cambios de estado de los ángeles en el Cielo

Capítulo 18, (162-169), El tiempo en el Cielo

Capítulo 19, (170-176), Las representaciones y las apariencias en el Cielo

Capítulo 20, (177-182), Los vestidos con que los ángeles aparecen ataviados

Capítulo 21, (183-190), Las moradas de los ángeles

Capítulo 22, (191-199), El espacio en el Cielo

Capítulo 23, (200-212), La Forma del Cielo y de cómo ésta determina las afiliaciones y las comunicaciones allá

Capítulo 24, (213-220), Los gobiernos en el Cielo

Capítulo 25, (221-227), El culto Divino en el Cielo

Capítulo 26, (228-233), El poder de los ángeles en el Cielo

Capítulo 27, (234-245), El habla de los ángeles

Capítulo 28, (246-257), El habla de los ángeles con el hombre

Capítulo 29, (258-264), La escritura en el Cielo

Capítulo 30, (265-275), La sabiduría de los ángeles del Cielo

Capítulo 31, (276-283), El estado de inocencia de los ángeles en el Cielo

Capítulo 32, (284-290), El estado de paz en el Cielo

Capítulo 33, (291-302), La unión del Cielo con la especie humana

Capítulo 34, (303-310), La unión del Cielo con el hombre a través de la palabra

Capítulo 35, (311-317), El Cielo y el Infierno son propios de la especie humana

Capítulo 36, (318-328), Situación de los no cristianos o de los que están fuera de la Iglesia, en el Cielo

Capítulo 37, (329-345), Los niños en el Cielo

Capítulo 38, (346-356), Los sabios y los sencillos en el Cielo

Capítulo 39, (357-365), Los ricos y los pobres en el Cielo

Capítulo 40, (366-386), Los matrimonios en el Cielo

Capítulo 41, (387-394), Los empleos de los ángeles en el Cielo

Capítulo 42, (395-414), La alegría y la felicidad en el Cielo

Capítulo 43, (415-420), La inmensidad del Cielo

Parte II - El mundo de los espíritus y el estado del hombre después de la muerte.

Capítulo 44, (421-431), De lo que es el mundo de los espíritus

Capítulo 45, (432-444), Con respecto a su interioridad, todo hombre es un espíritu

Capítulo 46, (445-452), La resurrección y la entrada a la vida eterna

Capítulo 47, (453-460), El hombre después de la muerte está en completa forma humana

Capítulo 48, (461-469), Después de la muerte el hombre posee todos los sentidos, toda la memoria, pensamiento y afección que tuvo en el mundo, no dejando nada tras de si, sino su cuerpo terrenal

Capítulo 49, (470-484), El hombre después de la muerte es tal como lo fue en su vida en el mundo

Capítulo 50, (485-490), Las delicias de la vida de cada cual, se transforman, después de la muerte, en las delicias correspondientes

Capítulo 51, (491-498), El primer estado del hombre después de la muerte

Capítulo 52, (499-511), El segundo estado del hombre después de la muerte

Capítulo 53, (512-520), El tercer estado del hombre después de la muerte: estado de instrucción para aquellos que entran al Cielo

Capítulo 54, (521-527), Nadie entra al Cielo por mera misericordia sin los medios necesarios para ello

Capítulo 55, (528-535), No es tan difícil vivir la vida que conduce al Cielo como muchos creen

Parte III - El Infierno

Capítulo 56, (536-544), El Señor gobierna los infiernos

Capítulo 57, (545-550), Ninguno es arrojado al Infierno por el Señor, esto lo hace el espíritu de cada cual

Capítulo 58, (551-565), Todos los que están en los infiernos están en los males y en los errores que hay en ellos, derivados del amor al yo (egoísmo) y al mundo

Capítulo 59, (566-575), Lo que es el fuego del Infierno y el crujir de dientes

Capítulo 60, (576-581), La malicia y los artificios de los espíritus infernales

Capítulo 61, (582-588), La aparente situación y número de los infiernos

Capítulo 62, (589-596), El equilibrio entre el Cielo y el Infierno

Capítulo 63, (597-603), Por medio del equilibrio entre el Cielo y el Infierno, el hombre tiene libertad

795. 'All the high mountains beneath the whole sky were covered' means that all goods stemming from charity were done away with. This is clear from the meaning of 'mountains' among the most ancient people. Among them 'mountains' meant the Lord, for they conducted their worship of Him on mountains because these were the loftiest parts of the earth. Consequently 'mountains' meant heavenly things which they also called 'the most high', and accordingly love and charity, and so the goods that stem from love and charity, which are heavenly things. In the contrary sense also, the people who are haughty are called 'mountains' in the Word, and so mountains also mean self-love. The Most Ancient Church also is meant in the Word by 'mountains' from the fact that mountains rose up above the earth and were nearer so to speak to heaven, where things have their origins.

[2] That 'mountains' means the Lord, and all heavenly things deriving from Him, that is, goods that stem from love and charity, is clear from the following places in the Word. These show what 'mountains' means in particular, for every single detail takes its meaning from the matter to which it applies. In David,

The mountains will bring peace, and the hills, in righteousness. Psalms 72:3.

'Mountains' stands for love to the Lord, 'hills' for love towards the neighbour, such as existed with the Most Ancient Church, which, since it was of such a nature, is also meant in the Word by 'mountains' and therefore 'hills'. In Ezekiel,

On My holy mountain, on the mountain height of Israel, said the Lord Jehovih, there all the house of Israel, all of them that are in the land, will serve Me. Ezekiel 20:40.

Here 'holy mountain' stands for love to the Lord, 'mountain height of Israel' for charity towards the neighbour. In Isaiah,

It will be in the latter days that the mountain of the house Jehovah will be established on the top of the mountains, and raised above the hills. Isaiah 2:2.

This stands for the Lord and consequently for everything heavenly.

[3] In the same prophet,

Jehovah Zebaoth will make for all peoples on this mountain a feast of fat things, and He will swallow up on this mountain the face ¹ of the covering. Isaiah 25:6-7.

'Mountain' stands for the Lord and consequently for everything heavenly. In the same prophet,

It will be that on every high mountain, and on every lofty hill, there will be brooks, streams of water. Isaiah 30:25.

'Mountains' stands for goods that stem from love, 'hills' for goods that stem from charity, such goods being the source of truths of faith, which are 'brooks and streams of water'. In the same prophet,

You will have a song as in the night when a feast is hallowed, and joy of heart as when one goes with a flute to come to the mountain of Jehovah, to the Rock of Israel. Isaiah 30:29.

'Mountain of Jehovah' stands for the Lord with reference to goods that stem from love, 'Rock of Israel' for the Lord with reference to goods that stem from charity.

[4] In the same prophet,

Jehovah Zebaoth will come down to fight on Mount Zion and on its hill. Isaiah 31:4.

Here and in many other places 'Mount Zion' stands for the Lord and consequently for everything celestial, which is love, and 'hill' for what is celestial but lower, which is charity.

In the same prophet,

Get you up on to the high mountain, O Zion, herald of good tidings; lift up your voice with strength, O Jerusalem, herald of good tidings. Isaiah 40:9.

'Getting up on to the high mountain and declaring good tidings' is worshipping the Lord from love and charity, which are inmost things, and are therefore also called most high. That which is inmost is referred to as the most high. In the same prophet,

Let the inhabitants of the rock sing, let them shout from the top of the mountains. Isaiah 42:11.

'Inhabitants of the rock' stands for those who abide in charity, 'shouting from the top of the mountains' for worshipping the Lord from love. In the same prophet,

How beautiful on the mountains are the feet of Him who is bringing good tidings, causing peace to be heard, bringing good tidings of good, causing salvation to be heard. Isaiah 52:7

'Bringing good tidings on the mountains' in like manner stands for preaching about the Lord from doctrine concerning love and charity, and for worshipping from these. In the same prophet,

The mountains and the hills will resound before you with song, and all the trees of the field will clap their hands. Isaiah 55:12.

This stands for worshipping the Lord from love and charity, which are 'the mountains and the hills', and from faith deriving from these, which is 'the trees of the field'.

[5] In the same prophet,

I will set all My mountains as a way, and My pathways will be raised up. Isaiah 49:11.

'Mountains' stands for love and charity, 'way' and 'pathway' for the truths of faith deriving from these, which are said to be 'raised up' when they stem from love and charity, which are inmost. In the same prophet,

He who trusts in Me will take possession in the land, and will inherit My holy mountain. Isaiah 57:13.

This stands for the Lord's kingdom where there is nothing other than love and charity. In the same prophet,

I will bring forth seed from Jacob, and from Judah the heir of My mountains, and My chosen ones will possess it. Isaiah 65:9.

'Mountains' stands for the Lord's kingdom and for celestial goods, and 'Judah' for the celestial Church. In the same prophet,

Thus said the High and Lofty One inhabiting eternity, whose name is the Holy One. I dwell as the High and Holy One Isaiah 57:15.

Here 'high' stands for holy. Consequently 'mountains', on account of their height above the earth, meant the Lord, and holy heavenly things that are His. This also is why it was from Mount Sinai that the Lord proclaimed the Law. Love and charity are also what the Lord means by 'mountains' when, in reference to the close of the age, He says that those who were then in Judaea were to flee to the mountains, Matthew 24:16; Luke 21:21; Mark 13:14. Here 'Judaea' stands for the vastated Church.

Notas a pie de página: