17
Entonces tomé las dos tablas, y arrojélas de mis dosmanos, y quebrélas delante de vuestros ojos.
Komentář k tomuto verši
Napsal(a) Alexander Payne (strojově přeloženo do Español)
Versículo 17. Así pues, no hay acuerdo entre la percepción de lo que es bueno y verdadero dada al hombre espiritual, y las cosas amadas por el hombre natural; el estado pervertido de este último priva a la mente espiritual del poder de querer el bien y entender la verdad, y esta ruptura entre el cielo y la vida exterior se hace evidente incluso para el propio hombre natural.